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El Vía Crucis más famoso del país...

Es uno de los paseos más agradables de Tandil, fue inaugurado en enero de 1943; y es considerado uno de los más famosos y mejor ubicados del mundo.



Son famosas las Semanas Santas en este lugar especial de la Argentina, que recibe en esa época del año a miles de peregrinos que se trasladan desde lugares recónditos del país.



En un recorrido realizado en un paisaje serrano, parquizado se pueden transitar las 14 estaciones del Vía Crucis y terminar el ascenso en una sólida Cruz que domina el cerro donde está emplazado, y que fue traída desde Bariloche, construida con madera de alerce, que con los años fuera reemplazada por una cruz de cemento.



Antes de recorrer el sendero que nos muestra el Calvario se encuentra la Capilla Santa Gemma que fue diseñada por el destacado arquitecto Bustillo.





Cada estación está representada por bellas imágenes realizadas con rocas propias del lugar.

Todos los años un grupo de actores lugareños se animan a recrear los últimos pasajes de la vida de Cristo.

Se calcula que cada año la zona recibe para esta época unos 50000 visitantes. Para disfrutar de Tandil en este momento del año se recomienda realizar las reservas con la antelación suficiente.

Existen muchas versiones con respecto a su nombre, pero la más divulgada dice que es la conjunción de dos vocablos mapuches o araucanos; donde el término “dil” significa roca y “thaun” equivale a latido. Por lo tanto “la roca que late” en franca alusión a la piedra Movediza, es tal vez el nombre más acertado para este lugar.

Más antigüo, imposible...

Este núcleo orográfico ostenta las rocas más viejas y desgastadas del continente sudamericano con una antigüedad de casi 2500 millones de años; ya que estas pertenecen al Macizo de Brasilia y fueron remodeladas durante los tiempos precámbricos.



Se trata de rocas de gran dureza y consistencia que aparecen hoy como elevaciones que no superan en algunos casos los 200 metros y en el medio de un paisaje muy desordenado con muestras de gran erosión.



La historia de sus primeros hombres...

El hombre primitivo llegó a estas tierras hace unos 10000 años; y convivieron con gliptodontes y algunos de los grandes mamíferos que poblaron este sector de la provincia.

Esta zona estuvo ocupada por indios bastante aguerridos que asolaban las pampas, hasta que el gobernador Martín Rodríguez en una campaña armada contra los aborígenes decide fundar el Fuerte Independencia en el año 1823.



Muchas batallas emprendieron los caciques de la región contra este fuerte que muy pronto se convirtió en un verdadero emblema del avance blanco en tierras salvajes.

Una vez afianzada la seguridad en la zona llegaron los primeros inmigrantes europeos que muy pronto hicieron florecer la economía de la región.



Sus suelos fueron ocupados para la agricultura y también la ganadería, que muy pronto contó en sus estancias con los mejores ejemplares vacunos traídos desde Europa.

El Parque Independencia

Muy cerca del centro de la ciudad de Tandil, se puede acceder al Parque Independencia, lugar histórico donde en 1823 se levantó el primer fuerte que dio origen a la ciudad.

Al parque se llega por medio de un pórtico de estilo renacentista que fuera donado por la comunidad italiana en ocasión de celebrar el primer centenario de la fundación de esta localidad.



La zona incluye un verdadero Castillo Morisco que fuera donado por el gobierno español en 1923; el mismo fue levantado sobre un promontorio de 280 metros; permitiendo así tener las mejores panorámicas de la ciudad, del lago y sobre todo de los cerros más importantes del lugar.



Se puede acceder con automóvil o caminando, el ascenso permite observar la forestación que acompaña al conjunto, formada por coníferas que le dan un aspecto inigualable al lugar. Los tandilenses recomiendan un ascenso nocturno para observar la verdadera belleza del conjunto.

Muy cerca del castillo se levanta la estatua ecuestre del fundador Don Martín Rodríguez , se trata de una composición del escultor Arturo Dresco.



Si descendemos por una imponente escalinata accedemos al Lago del Fuerte que forma un embalse que genera una zona de recreación de gran importancia para esta ciudad. Ideal para pasar el día en un ambiente de inigualable belleza.



































Si venís en Auto:

>> Desde Buenos Aires, por Ruta 30: tomando Ruta 3 desde Buenos Aires, pasando por Cañuelas, San Miguel del Monte, y empalmando con Ruta 30 en Las Flores.

>> Desde Mar del Plata, Azul, Lobería y Balcarce, por Ruta 226.

>> Otras rutas de acceso: Ruta 74 (desde Ayacucho y Benito Juárez), Ruta 2, Ruta 227, Ruta 29.



Distancias:



>> Capital Federal: 331 km

>> Bahía Blanca: 345 km

>> La Plata: 371 km

>> Mar del Plata: 169 km

>> Necochea: 165 km

>> Olavarría: 145 km

>> Pinamar: 228 km

>> Villa Gesell: 230 km



Si venís en Colectivo

>> Desde Buenos Aires las empresas que viajan son: Turismo Parque, Río Paraná y El Cóndor- La Estrella. El precio del pasaje de ida es de 40.

>> Otras empresas que viajan a Tandil: El Rápido, El Rápido Argentino, TAC, San Juan- Mar del Plata, entre otras..

Informes: Terminal de Ómnibus de Tandil: 0223- 432092



Si venís en Tren

>> Consultá los horarios y frecuencia con la empresa Ferrobaires.

Tandil es la ciudad cabecera del partido homónimo, ubicada en el sudeste de la provincia de Buenos Aires, Argentina, sobre la cadena serrana del Sistema de Tandilia.



La desaparecida Movediza muy pronto será restaurada

Si hay algo emblemático para esta ciudad es la disgregada roca “La Movediza”, sobre la cual se han contado muchísimas historias, algunas aceptables y otras casi fantásticas.



Se trataba de una inmensa mole rocosa con un peso superior a 300 toneladas, que oscilaba en un promontorio del terreno. Su forma, su original ubicación, y su oscilación la hicieron prontamente muy conocida. Llegaban turistas desde lugares remotos a tomarse fotografías junto a ella.

El 29 de febrero de 1912 la Movediza se desplomó y se disgregó, al pie del monte que la ostentaba, en tres trozos principales.



A partir de ese momento estuvo en el espíritu de los tandilenses la idea de rearmarla, reflotar ese símbolo caído que tanta fama les había dado.





Este paseo está muy cerca de la ciudad, se accede a la cima después de ascender por más de 300 escalones labrados en el granito; que permiten observar panorámicas de singular belleza.

Una de las explicaciones más lógicas sobre este mito es que toda la zona está cubierta por canteras donde se extraen materiales para la construcción, en las que se utiliza dinamita para llegar a las vetas, razón por la cual algún movimiento de estos pudo romper el equilibrio de la magnífica roca hasta hacerla rodar por el valle.



Actualmente se ha puesto en marcha un proyecto que tiene por finalidad restituir a su lugar de origen una réplica de la roca construido en cemento sintético y estructura interna de hierro. Se va a crear en la zona un Parque Lítico que llevará su nombre. Este emprendimiento devolverá a Tandil uno de sus hitos fundamentales, proyectando su inauguración para el año 2007.

Unico fenómeno en el mundo.

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